No necesita demasiada presentación porque forma parte de la vida de millones de familias españolas. Y en los últimos tiempos incluso para bien, porque no deja de marcar mínimos históricos. Se trata del euríbor a 12 meses, la referencia para la mayoría de las hipotecas a tipo variable en España. Tras llegar a escalar hasta el 5,5% en los momentos más tensos de la crisis financiera, tras la quiebra de Lehman Brothers en 2008, ahora lleva por debajo del 1% desde 2012 y del 0,5% desde el verano pasado. En abril, de hecho, va a marcar otro récord. Su media, que es la que se tiene en cuenta para las cuotas hipotecarias, caerá por primera vez del 0,20%. A falta de cuatro sesiones, su media se encuentra en el 0,185%. Como trasfondo de estos niveles, la expansiva política monetaria del Banco Central Europeo (BCE) bajo la batuta de su presidente, Mario Draghi. Con los tipos de interés oficiales en el 0,05%, con los tipos de la facilidad de depósito en el -0,20% y con su programa de compras de deuda (QE). Todos ellos, al unísono, abaratan los costes de financiación en la Eurozona, un efecto que se propaga también al euríbor y, por tanto, a las cuotas hipotecarias -si las cláusulas recogidas en el contrato no lo impiden-.
Lo que es seguro es que la expansiva política monetaria de Mario Draghi mantendrá al euribor en mínimos históricos al menos hasta 2017
Tanto es así que, al igual que el 30% de la deuda pública europea, esta semana el euribor a tres meses se ha situado en niveles negativos por primera vez en la historia. ¿Llegará a ocurrir lo mismo con el euribor a 12 meses? "No lo descarto, aunque no lo contemplamos", asegura José Luis Martínez Campuzano, estratega de Citi en España. "Pero sí lo vemos en tipos de interés nulos", añade. Es decir, que es posible que continúe bajando hasta el 0%.
¿Pero qué pasaría si el euríbor se situara en negativo? ¿Pasarían a pagar intereses los bancos a los hipotecados? Dependerá del nivel hasta el que caiga el euríbor y del diferencial contemplado en la hipoteca. En el supuesto de un contrato con una diferencial de 0,5 puntos sobre el euribor, si este cayera al -0,1%, el interés resultante para el cálculo de la cuota será del 0,4%.
Ahora, por ejemplo, ya hay hipotecas en francos suizos en las que los bancos abonan intereses a los clientes, pero se debe a que el Banco Central de Suiza tiene los tipos oficiales en una banda comprendida entre el -0,25 y el -1,25%, con objetivo central en el -0,75%, y la referencia hipotecaria en francos a 12 meses se mueve entre el -0,60% y el -0,80%. Por tanto, cualquier diferencial por debajo de estos niveles conducirá a que sea el banco el que pague intereses al cliente. Eso sí, en este tipo de hipotecas siempre hay que tener presente que existe otro riesgo: el del tipo de cambio, es decir, el de la evolución del cuerpo a cuerpo entre el euro y -en este caso- el franco suizo.
